El uso de cromo en procesos de descarga, podría ya no ser un problema para los curtidores que aún utilizan este químico que, además de ser cancerígeno y desprender fétidos olores, inhibe la fertilidad en la tierra.
Dos egresados de la maestría en Gestión e Innovación Tecnológíca y dos profesores de la División de Ciencias Naturales y Exactas, ambas partes de la Universidad de Guanajuato, han desarrollado una columna físico-química que es capaz de retener el 98 por ciento de esta sustancia antes de su llegada al drenaje.
La última clausura masiva de tenerías ocurrida en León, donde se ubica la mayor parte de las más de 900 tenerías existentes en el estado de Guanajuato, se dio en junio del año pasado. En aquella ocasión cerraron 15 establecimientos que fueron denunciados por vecinos fastidiados por los olores desprendidos en los procesos de curtiduría.
Más información de la nota aquí.