El nuevo presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha afirmado que impondrá aranceles a las importaciones de productos mexicanos, argumentando que de esta forma defenderá los empleos que se pierden por una “competencia desleal”; sin embargo, la medida podría afectar el consumo de los hogares estadounidenses, pues México es el principal proveedor de Estados Unidos en varios grupos de mercancías.
Tal es el caso de los equipos de transporte, en donde México representó el 26% de las importaciones totales que realizó Estados Unidos en 2015, el mayor porcentaje entre los países que comercian con el vecino del norte.
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