El mundo de la publicidad podría estar a punto de cambiar para siempre y, quizá, para bien. Sin embargo, contrario a lo que podría pensarse, no será un Don Draper contemporáneo quien la revolucione, sino un hombre que, cuando no está escuchando a Pink Floyd o jugando con sus nietos, se dedica a sondear las profundidades de la mente humana a través de electroencefalogramas o resonancias magnéticas. Su nombre: Robert Knight.
Descarga el reporte en el enlace inferior: